Piragüismo y musculatura están unidos. Y no es de extrañar sabiendo que con su práctica desarrollaremos muchas cualidades físicas. ¿Quieres saber cuáles?
Piragüismo y musculatura: el combo perfecto
El piragüismo es una disciplina que requiere de fuerza, de velocidad, de resistencia cardiovascular y de resistencia muscular. Así como de coordinación dinámica general y de coordinación intramuscular, etc.
Además, y aunque desde fuera veamos solamente unos brazos moviéndose, por dentro se suceden multitud de contracciones musculares. Gracias a ellas no solo conseguimos una ejecución eficaz del gesto sino desplazarnos a la mayor velocidad posible.
Como vemos, es un deporte muy completo que requiere el entrenamiento de muchas cualidades físicas. Por ese motivo, no es de extrañar que el piragüismo y la musculatura vayan de la mano.
Cómo se trabaja la musculatura con el piragüismo
Ya hemos mencionado que no podemos hablar de piragüismo y musculatura por separado. De hecho, aunque desde fuera no veamos su movimiento, los músculos están en constante trabajo.
A través de la contracción eficaz de los músculos de las piernas, de los paravertebrales, de los lumbares, de los abdominales y del resto de músculos que componen nuestro core, se conseguirá la estabilización necesaria. De esta manera, podremos permanecer y desplazarnos en la piragua.
En ese sentido, un buen entrenamiento de abdomen nos ayudará a fortalecer nuestro six pack.
Por otro lado, todas las articulaciones del tren superior estarán presentes trabajando en sinergia en cada palada. Así conseguiremos transmitir la máxima fuerza y potencia posibles a la vez que nos desplazaremos de forma más veloz y eficaz.
De este modo, trabajarán los músculos del antebrazo, ya que estos sujetarán uno de los extremos de la pala a lo largo de todo el movimiento o recorrido.
Además, también hacemos uso de nuestro codo flexionándolo y extendiéndolo constantemente ya que jamás llevaremos los brazos estirados al completo.
En ese sentido, los principales encargados de flexionar y extender los codos son los bíceps y los tríceps, por lo que también serán partícipes de la acción.
¿Haces piragüismo? No te pierdas estos ejercicios de bíceps con mancuernas
Piragüismo y musculatura: los músculos olvidados
Siguiendo con este análisis anatómico, no podemos dejar de mencionar los hombros.
Sin duda alguna, los diferentes movimientos a la hora de remar harán que se activen tanto los músculos que rodean la articulación del hombro. Sin olvidarnos de los pectorales y los dorsales, así como el resto de músculos de la espalda.
Además, es importante recordar que son movimientos que realizamos muchas veces a lo largo del día. O, en otras palabras: todos esos músculos estarán expuestos a un gran desgaste y riesgo de lesión.
Por ese motivo, indistintamente del nivel que tengas como piragüista, debes fortalecer todas las estructuras tanto musculares como articulares implicadas.
Solo así conseguiremos que la práctica del piragüismo y la musculatura de nuestro cuerpo estén en equilibro.
Así pues, disfruta de la piragua pero, como siempre, hazlo de forma inteligente: con un buen plan. De esta manera no solo mejorarás sino que además minimizarás los posibles riesgos de lesión.
Óscar Rubio
Entrenador personal
Preparador de pruebas físicas
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Lara
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